Los residentes de las parroquias Ximena y Febres-Cordero exponen sus problemas a los aspirantes a concejal.
La oferta electoral empezó, pero las necesidades apremian para los habitantes de las parroquias urbanas de Guayaquil, Ximena y Febres-Cordero, pertenecientes a la circunscripción electoral uno de la urbe porteña. Urgencias que los residentes de estos sectores exponen a los 50 candidatos que aspiran a una concejalía de dicha circunscripción en el Cabildo de la ciudad.
“Espero que los concejales arreglen los lugares que están abandonados y les den uso para la comunidad”, dice Tanya Delgado, residente del Guasmo Este, en la parroquia Ximena, al sur de Guayaquil. En los más de ocho años que vive ahí, según continúa contando, siempre ha tenido los mismos problemas: “Los parques están abandonados, el sector necesita luminarias y el consumo de drogas ha aumentado en el sector”.
Expectativa que comparte Vinicio Morales, residente del Guasmo Sur desde hace tres años, quien también señala que su sector tiene problemas con la recolección de basura, la mendicidad, el alcantarillado y los perros callejeros. “Son problemas muy comunes acá en el sur (de Guayaquil) que no han sido atendidos y deberían ser tratados”, señala y hace hincapié en que la falta de iluminación en estos sectores genera el escenario para que actúen bandas criminales y el expendio de droga.
Los problemas no terminan ahí. Alejandro Pin, residente del sector de Portete y dirigente barrial de la parroquia Febres-Cordero, indica que en dicha jurisdicción hay obras paralizadas, problemas de tránsito con vehículos pesados y demás temas que considera deberían ser tomados en cuenta por quienes aspiran a conseguir las cinco concejalías para representarlos.
“Hace seis meses comenzaron a construir la calle entre la 26 y la Q hasta la E y la 26, pero la han dejado a medio talle”, cuenta Pin y destaca que otro de los problemas que suelen tener es que tráilers suelen pasar por la calle 26 (av. Portete de Tarqui) “para acortar camino y llegar hasta la Perimetral”. Situación que, según continúa, ha provocado daños eléctricos.